miércoles, 3 de septiembre de 2014

ALUBA cumple 30 años de lucha contra la bulimia y la anorexia

En el año 2015, la Asociación de Lucha contra la Bulimia y la Anorexia (ALUBA) cumplirá 30 años de trabajo. Un año más tarde, celebrará el aniversario de su conformación como Asociación Civil.

“ALUBA fue fundada por los padres de las asistentes al grupo que armamos en Parque Patricios. En esa época, no había tratamientos para anorexia y bulimia. Entonces, comenzamos en el servicio de gastroenterología de un hospital, pusimos avisos y, en tan solo dos meses, ya teníamos 80 pacientes. Ninguna estructura del hospital aceptaba que una psiquiatra generara tanto barullo. Me combatieron de todas las formas hasta que los padres crearon la Asociación y defendieron el derecho a tratarse a las chicas con estas patologías”, recordó la Dra. Mabel Bello, Directora de la entidad.

En ese marco, explicó: “La anorexia y la bulimia son adicciones como la drogadicción o el alcoholismo. Son escapes de la realidad, cuando uno no es capaz de sostenerla. Detrás de la patología alimentaria está el miedo a vivir, a las responsabilidades, a crecer y al futuro. Entonces, la vida queda enclavada en un espejo, en la forma del cuerpo y en la calidad de la comida”.

Recientemente, se publicó un estudio que indica que en el 40% de casos de desórdenes alimentarios los padres han tenido injerencia. La Dra. Bello adhirió a esta teoría y agregó: “También tenemos que decir que el 40% de estas patologías son genéticas. Es decir, hay una predisposición. El 60% restante es cultural”.

“La familia forma parte de la cultura. Casi todas las mamás quieren tener una hija flaca, porque la cultura lo demanda así. Es decir, no se trata de un tipo especial de familia, sino el efecto de todo eso que compartimos. Cuando nos juntamos las mujeres, lo primero que decimos es ‘qué flaca que estás’, ‘vas al gimnasio’, etcétera. Hablamos todo el tiempo de comida y de cuerpo, y los chicos crecen en esa cultura”, recalcó en diálogo con “Resumiendo punto cuatro” por Radio Arinfo.

De todas maneras, la profesional hizo hincapié en que “no se trata de culpar a la familia de una patología alimentaria, sino de decir que el reflejo de la cultura se ve en estas cosas que compartimos entre todos”.

“Hay grupos predispuestos, más vulnerables a las patologías alimentarias. Por ejemplo, las chicas o chicos perfeccionistas y muy estudiosos. Los que quieren hacer todo demasiado bien, que son muy cuadriculados, ortodoxos y que no se amoldan a la revolución de la adolescencia. Pierden el camino, se meten para adentro y la cultura les favorece que piensen en su cuerpo, que se miren al espejo, que se critiquen y que resuman en todo en que si son flacos van a tener éxito, como si fuera algo mágico”, planteó.

Luego, añadió: “Otro grupo predispuesto son los chicos con poca estabilidad en el ánimo, que se enojan o frustran rápido, que tiene rabietas o les cuesta la disciplina. No soportan el estrés de la adolescencia y caen en lo mismo. Piensan que ser flacos es la solución”.

“En la actualidad estamos acostumbrados a ver imágenes. En la computadoras, las redes sociales, los teléfonos, la TV. Todos nos muestran cómo debe ser una persona, en lugar de cómo es. No muestran al 99% de los tamaños, sino al 1% inalcanzable para la mayoría de los sujetos. Muestran a eso como modelo único. Quedamos embobados por esas imágenes y nos olvidamos de que en la calle hay altos, bajos, flacos y todos tienen éxitos según sus méritos, no por la forma de su cuerpo. Nos creemos esa tontería de que solo los flacos y altos tienen éxito”, sostuvo la Dra. Bello.

Al ser consultada en relación al efecto que generan las imágenes de cuerpos perfectos, la médica psiquiatra señaló: “En muchas partes del mundo, se usan modelos muy flacas y, si bien una parte de la publicidad ha tomado conciencia y se dirige a la mujer real con mensajes reales, la mayoría sigue esa especie de engaño. En la TV son todos flacos y tienen esos cuerpos, supuestamente, sin ponerse ni sacarse nada.

“Los hombres también sufren estas patologías. Hoy vemos al ‘Pocho’ Lavezzi y a los jugadores de la selección con el cuerpo desnudo, depilado y con cremas. Llaman la atención sobre el cuerpo y los varones se preocupan más. Cuando comenzamos, hace 30 años, venían solo mujeres, hoy tenemos 4 o 5 por cada 10 chicas. La proporción ha aumentado considerablemente por este cambio cultural. Los hombres también se preocupan por tener un cuerpo delgado”, resaltó desde los micrófonos de Radio Arinfo.

Finalmente, la Dra. Bella destacó la necesidad de hacer campañas de concientización: “Todavía la gente no sabe sobre patologías alimentarias. Los padres que están alejados de lo cotidiano de la casa piensan que son caprichos y no se dan cuenta que esta es una de las patologías con mortalidad más alta entre las psiquiátricas de la adolescencia”.

“Es algo muy severo y, como toda adicción, tiene un comienzo subrepticio y una prosecución muy fea, que se agrava día a día”, alertó.

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